domingo, 22 de abril de 2007

Tan Uno

Y a veces la inspiración es una compañía para el aburrimiento. Lo traumático también suele ser determinante. Es así que decidió sentarse cerca de esos papeles, para cuando ella llegara. O quizás para cuando él llegara…parecía que a veces se sentía también un poco obligada por los otros, y no sólo por su propia consciencia.
Y lo traumático de hoy había sido algo tan leve, tan intrascendente para el resto del mundo que probablemente nadie se hubiera enterado a no ser por su cara de horror y las ganas de llorar que se le escaparon por la boca. Le había parecido verlo, una vez más, parado frente a ella, desafiándola.
Es muy probable que el resto viera sólo un hombre, con gesto apacible y cálido. Con un bastón y un paquete color café debajo de su brazo. Ella vio más. Vio tantas cosas juntas, tantas vueltas, tanta lentitud que hacía de ese instante, el momento más largo de su vida.
Cuando se bajó del micro, corrió a su casa, pensando en escribir.
Quizás porque el papel no aguantó, porque de tanto tratar de expresar, el cuerpo no soportó… quizás el alma. Pero cuando el llegó la encontró dormida sobre su hoja de papel en blanco. Y al levantarla fue como si cargara una pluma en brazos. Ahí comprendió que ella estaba vacía también, y ya no hubo forma de hacerla despertar.

No hay comentarios: